Es una tabla de treinta y cinco por veinte y cinco centímetros, me ha llevado hacerlo seis horas.
El primer día no quede contenta de como quedo el manchado, la profesora no me conocía ni yo a ella, no conocíamos el estilo de pintura que hacemos, así que cuando a la semana siguiente llegue, por cortesía le pregunte que qué hacia con aquello, para mi un desastre de manchas. Has veladuras con la pintura muy liquida, fue su respuesta.
Tome el pincel y empecé a darles forma a las nubes pero las pinceladas de las primeras mano se transparentaban y como no estaban bien desde el primer momento pues iba de mal a peor,
así que solté el pincel y use los dedos que es la mejor herramienta que hay para hacer estos cielos llenos de colores, luces y sombras.
Casi sin darme cuenta, mis dedos fueron dando forma a las nubes poniendo capas de fina pintura hasta conseguir esta explosión de color.
El pincel lo use para los árboles y los edificios, el cielo lo hice con los dedos que es como el pintor se siente mas cerca de su cuadro.
Marinela
Marinela