Los Álamos


Mi nueva pintura terminada.  Este paisaje lo he copiado de una fotografía que le vi a mi hermana y la cual había hecho uno de sus hijos en un viaje. Me gustó el colorido y se la pedí para en alguna ocasión pintarla, ya llegó esta y a quien mejor que a ella para regalarle el cuadro.
En gustos no hay nada escrito. ¡Que verdad más grande! Si pensamos en todo lo que rige este sentido, no solo en lo gustativo, en los sabores que sentimos en el paladar... Es mucho más profundo, es el sentido que más forma nuestra personalidad. Desde que nacemos ya empezamos a distinguir que alimentos nos gustan más, en que brazos estamos más a gusto... Desde pequeños el sentido del gusto empieza a desarrollarse sobre todo lo que nos rodea.  Es la sensación de sentir que es lo que nos hace feliz y lo que no. Nos gusta, estamos contentos. No nos gusta, nos sentimos contrariados. 
Con el paso de los años vamos aprendiendo que ni todo es blanco ni todo negro. Aprendemos que todo en la vida tiene matices y que lo mejor es hacer por encontrarlos.
Desde ayer, ando dándole vueltas a todas las cosas que se dicen del presidente Sr. Rodríguez Zapatero. La cantidad de adjetivos que le han dedicado y no se han quedado cortos, creo que es al presidente español que más cosas le han adjudicado, y ninguna bonita, ¡Bueno, solo lo de Bambi y despectivamente!
Pienso que no hay que ensañarse con el caído hasta que se demuestre que es culpable ¡Sea quien sea!
Hace un puñado de años, comentando con mi familia sobre la economía del país, me atreví a vaticinar que tanta prosperidad no iba a durar mucho, que lo que teníamos era una pompa de jabón que en cualquier momento estallaría. 
El Sr. R.Zapatero tuvo la desgracia de llegar en esos momentos. No vio lo grande que era la burbuja y por eso no vio cuando estallo, La crisis mundial lo atrapo. ¿Iluminado y crédulo, inocente como un cervatillo, inexperto en las lideres de gobernar?  ¿Un soñador?  ¿Un irresponsable?  ¡No lo se!
Yo no tengo patrón ni perrito que me lama. Hace más de treinta años que voy a votar y siempre apuesto a caballo perdedor. La oposición debe de existir.