Mi nieta Carola

Después de tantos días vuelvo  para subir mi penúltima pintura, (No me gusta decir la última, por si acaso)  ya que estoy haciendo otras dos, una en Cáritas y otra que empecé el jueves en los Talleres.
Esta la termine hace veinte días, no la he subido por que quería enmarcarla, pero aún no he encontrado un marco como quiero, blanco mate y liso, que pienso que es lo que le va a esta pintura. La he copiado de una fotografía de mi nieta corriendo por una playa de Irlanda  hecha por su madre.
Desde que me la envió mi hija deseaba pintarla, ¡Me encanta esta fotografía!

¡Bueno...! Ya parece que el cambio de estación ha dejado de afectarme! Aparte queda la pérdida de un familiar, eso es otra cosa muy triste que se unió a la llegada del otoño.
Según tengo entendido, hay muchas personas a las que les afecta anímicamente el cambio de estaciones como la primavera y el otoño, al menos a mi me pasa. Me pongo triste y muy cansada, ¡Es una lata estar así ! ¡Y, encima el cambio de horario! Pero ya va llegando el frío que es lo que me sienta bien y con poca ropa de abrigo estoy a gusto.
Tengo mucha suerte de vivir aquí. los veranos son calurosos, y los inviernos poco fríos, comprendo que para la mayoría de las personas el invierno es más duro y más para aquellas que no tienen nada o casi nada para vivir.
Es muy triste saber y no poder hacer algo grande para paliar el hambre en el mundo. Quizás si ponemos una gota de agua en el mar, seguro que no se notará, pero si ponemos miles de ellas en nuestras ciudades puede que llenemos algunos barriles para ayudar a los más necesitado, a los que tenemos cerca de nosotros  y no se atreven a pedirnos pero sí lo hacen a Cárita y otras organizaciones que se dedican a prestar ayuda a los que la necesitan, que por desgracia. hoy día son muchos. 
Demos nuestro grano de trigo, que grano a grano se hace una montaña.