Ya he dado por terminado este cuadro.
Hace tiempo que tenia guardada la fotografía que corté de una revista. Siempre he pensado que era real el motivo, no una pintura, la he simplificado quitando, canalones de desagües, luces, suelos de ladrillos y algunas cosas más.
Lo que me atraía de ella era la profundidad y el cambio de luces que tenia, no se si lo he conseguido, pero la verdad es que es el cuadro que pintando, he disfrutado más.
Ayer se termino la exposición que este año ha sido puesta en la Parroquia del barrio, en los salones de la parte baja de esta. Estaba muy bonita, con buenas pinturas, ya que hay alumnos que pintan muy bien.
Este año he hecho cuatro cuadros y estoy satisfecha con los resultados, pienso que no se me puede pedir más con dos horas que dedico a la semana a pintar.
Los días se hacen corto para las cosas que hacemos. Años atrás, cuando llegaba la noche y con la mente repasaba el día, me alegraba de todas las cosas que había hecho, sin sentir cansancio, satisfecha de mi jornada de trabajo como madre de familia y ama de casa.
Ahora hay días que ya me levanto cansada, otros, parece que me han quitado años, cuando no puedo, pongo el freno, y cuando sí... ¡pues adelante!